Por qué la música

La música no es un lenguaje extraño ni intelectual. Se trata de un lenguaje innato, y el profesor, los padres y el entorno interactúan con el niño sacando el músico que lleva dentro. Se trata de aprovechar esta habilidad innata para expresarse a través de este lenguaje que es la música. Otros aspectos que se verán beneficiados además de la percepción auditiva serán, por ejemplo, la inteligencia emocional, la sociabilidad, la psicomotricidad, la autopercepción y la autoconfianza, la coordinación, la inteligencia espacial, la capacidad de ser paciente y de trabajar en grupo, y como elemento culminante y principal, la creatividad. Gracias a esto la resolución de problemas en cualquier ámbito de la vida adulta podrá llegar a ser más fácil.

Las sesiones

La riqueza musical es fundamental. En las sesiones se educa tanto a los niños como a los padres, para que éstos a su vez sepan crear el entorno musical en su hogar, aprovechando el momento evolutivo. Se les facilitan materiales y recursos, y se hace un seguimiento de la etapa en la que se encuentra cada bebé y su evolución. Si el niño tiene alguna carencia o discapacidad, aumenta la importancia de este tipo de actividad, donde cada habilidad que aprenda será crucial.

ISABEL ALBALADEJO, PROFESORA DE EDUCACIÓN MUSICAL TEMPRANA POR EL INSTITUTO GORDON

Nacida en Ibiza (Baleares), es diplomada en Educación Musical (Universidad de Alicante, 2003) y titulada superior en Canto Lírico (Conservatorio del Liceo, 2012). Ha cursado estudios de Piano, Pedagogía Musical, Historia y Ciencias de la Música, Dirección Coral y Música Antigua. Su experiencia laboral aborda variedad de terrenos, desde la primera infancia hasta el ámbito universitario. Obtiene la Certificación de profesora de Educación Musical Temprana por el Instituto Gordon con las mejores calificaciones.